El SCA ( Autenticación Sólida del cliente) es un nuevo requisito regulatorio europeo para reducir el fraude y hacer que los pagos en línea sean más seguros.
La SCA requiere que la autenticación use al menos dos de los siguientes tres elementos:
Algo que el cliente conozca ( por ejemplo, la contraseña o PIN)
Algo que el cliente tenga ( por ejemplo Token de autenticación o OTP)
Algo que sea parte del cliente ( por ejemplo la huella dactilar o reconocimiento facial).